Por Aida Torres
Socióloga
Estamos librando una lucha para lograr el respeto al Plan de las Áreas Revertidas, que ha sido ignorado por los gobiernos, pero no han ignorado las propuestas para hacer lo que no era parte del Plan.
Desde nuestras comunidades hasta el Canal de Panamá, existe una línea legal que planificadamente protege el agua para consumo humano y el movimiento de naves. Hoy esa planificación se desconfigura, con usos ilegales del suelo, no planificados. Desde el municipio nos convocan para aprobar cambios de uso de suelo. Sin embargo, ello no es legal, ya que va cambiando el territorio y en él nuestras comunidades, a un panorama insostenible, de caos y despojo; también allí se va la memoria histórica en el abandono de las edificaciones. Ese proceso de descomposición de un Plan que nos costó 9,3 millones de dólares, sólo acabará con el Canal, con la calidad de vida de quienes vivimos aquí, con la cuenca y el agua para nuestro consumo.
Este 1° de octubre, día que hace 43 años entramos a la Zona del Canal, estaremos todos examinando las violaciones al Plan y definiendo las acciones a tomar, porque somos custodios del patrimonio de un pueblo que luchó por la conquista del Canal y sus áreas adyacentes.
Nos vemos en la Iglesia Santa María, Balboa, 9:30 a.m.
