Por Ellas Ríos Vega
Sociólogo y analista político
Han transcurrido 47 años de la firma oficial de los denominados Tratados ”Torrijos-Carter”, dirigidos a la recuperación del Canal de Panamá, pero la lucha de liberación nacional del pueblo panameño no ha culminado ante los desafíos hegemónicos.
Muchos fueron los esfuerzos y sacrificios del movimiento social y popular, conjuntamente con otras fuerzas políticas nacionales e internacionales que ofrendaron sus vidas para alcanzar los objetivos trazados por tantos años de sacrificios y luchas patrióticas contra el colonialismo.
Hoy, la población debe reconocer el sacrificio del movimiento estudiantil, liderizado en los colegios y en las calles por la gloriosa Federación de Estudiantes de Panamá (FEP), que exigió el desmantelamiento escalonado de las bases e instalaciones del Comando Sur en suelo panameño.
Sin la participación, la determinación y decisión de la juventud combativa no habría sido posible el logro de unos Tratados del Canal. Pese a numerosos obstáculos y amenazas, se alcanzó el objetivo principal y los jóvenes iintrépidos y valientes ingresaron a la abolida Zona del Canal, bajo la consigna de “que se van, se van los gringos”.
Omar Torrijos Herrera tomó la decisión de que las tropas extranjeras acantonadas a ambos lados de la vía interoceánica debían salir de Panamá. Ese paso histórico y extraordinario de la descolonización territorial le costó la vida al jefe militar, el 31 de julio de 1981, en un supuesto ”accidente aéreo”.
El propio Torrijos advirtió que los panameños destruirían el canal interoceánico si el Senado norteamericano no aprobaba los Tratados del Canal firmados en Washington, el 7 de septiembre de 1977. Mientras, jóvenes dirigentes de la FEP aguardaban en las noroccidentales montañas de Coclesito, en posición de firme, para iniciar la lucha por la soberanía, la liberación nacional y la Verdadera independencia.
El pueblo panameño ha acumulado una trayectoria histórica para poder ejercer la soberanía e independencia. Esa lucha está inscrita en los libros de la contienda de los pueblos del mundo por la verdadera liberación nacional, por el progreso social y la vida digna de la humanidad.
Corresponde a las actuales y futuras generaciones seguir exigiendo la neutralidad del territorio contra las formas de intervencionismo, en procura de una vida mejor para todos los pueblos del mundo.
¡Soberanía o Muerte, Venceremos!