La privatización y posterior fragmentación del Instituto de Recursos Hidráulicos (IRHE) restó a Panamá poder para diseñar sus propios planes de desarrollo. Este asunto acapara la agenda de los movimientos sociales que apuestan por la recuperación de la capacidad rectora del Estado y la ordenada electrificación.
La crisis internacional, el debilitamiento de la economía y la pérdida del patrimonio de la nación, han mostrado que es imposible aspirar a un desarrollo sostenible y seguro sin el dominio y la expansión de la matriz energética.
Asimismo, el alza unilateral de tarifas eléctricas por empresas que operan en la opacidad contractual, justifican las exigencias populares de democratizar la energía y tratar de recuperar los avances perdidos con la privatización en 1997.
La generación, transmisión y distribución de electricidad son componentes de un sistema que demanda cambios efectivos, en elos que los consumidores estén verdaderamente representados.
En ese sentido, se requiere garantizar la soberanía y la transparencia efectiva en el ámbito energético, y vencer los obstáculos y entuertos que estimulan la dependencia externa.
Este programa pretende generar un debate sobre la situación de la energía y el derecho a administrar los valiosos recursos del Estado a beneficio de la población panameña.
Tal como lo dijo Ford, nuestro sistema eléctrico es una caja negra, la cual solamente pueden acceder quienes dirigen el monopolio del negocio que genera en detrimento de las grandes mayorías. Qué hacer? Seguir con denuncias que solamente puede hacer Bayano Digital.
Don Alberto Velásquez:
Muchas gracias por sus excelentes y atinados comentarios sobre el tema de la Energía, abordado en Café Bayano.
Saludos cordiales,
David Carrasco
Director de Bayano digital