La iniciativa «Peoples’ Climate Vote» del PNUD refleja el sentir de más de la mitad de la población mundial tras el análisis de sus resultados por parte de la Universidad de Oxford. El 64 por ciento de las personas encuestadas cree que el cambio climático es una emergencia global, pese a la pandemia de COVID-19.
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El jueves 28 de enero fueron divulgados los resultados de Peoples’ Climate Vote (el Voto popular por el clima), la encuesta de opinión pública sobre el cambio climático más importante jamás realizada. La encuesta abarca 50 países con más de la mitad de la población mundial, incluidas más de medio millón de personas menores de 14 años, un segmento demográfico clave que normalmente no puede participar en los procesos electores normales.
Los resultados detallados de la encuesta, desglosados por edad, género y nivel educativo, serán trasladados a gobiernos de todo el mundo por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), ente organizador de la innovadora encuesta junto con la Universidad de Oxford. En muchos de los países participantes, esta es la primera vez que se realiza una encuesta de opinión a gran escala sobre el cambio climático. Con una ronda decisiva de negociaciones prevista para la Cumbre sobre el Clima de la ONU que se celebrará en noviembre en Glasgow (Reino Unido), 2021 se presenta como un año decisivo para los compromisos de acción climática de los países.
En la encuesta se preguntó a los participantes si el cambio climático constituye una emergencia global y si estaban a favor de dieciocho políticas climáticas clave dentro de seis ámbitos de actuación: energía, economía, transporte, agricultura y alimentación, naturaleza, y protección de las personas.
Los resultados de la encuesta revelan que muchas veces los ciudadanos desean políticas climáticas amplias que superen el marco de medidas actual. Por ejemplo, en ocho de los diez países encuestados con las emisiones más altas del sector eléctrico, una mayoría dio su respaldo a las energías renovables. En cuatro de cada cinco países con las emisiones más altas a consecuencia de los cambios en el uso de la tierra y con datos suficientes sobre las políticas preferidas, se observó un respaldo mayoritario a la conservación de los bosques y de la tierra. Nueve de cada diez países con una población más urbanizada se mostraron a favor del uso de coches y autobuses eléctricos, o de bicicletas.
Según Achim Steiner, Administrador del PNUD, “independientemente de cuál sea su origen, los ciudadanos coinciden en que el cambio climático constituye una emergencia global. El Voto popular por el clima ha mostrado también que las personas son conscientes de la escala de acción que se necesita, desde una agricultura respetuosa con el clima, a la protección de la naturaleza, y la inversión en una recuperación verde. El Voto popular por el clima otorga a los países un mandato claro para adoptar medidas climáticas amplias con el apoyo de la opinión pública”.
Esta innovadora encuesta fue distribuida a través de redes de juegos para dispositivos móviles con el propósito de incluir a grupos de personas a las que es difícil acceder con los métodos de encuesta tradicionales, como los menores de 18 años. Expertos en demoscopia de la Universidad de Oxford procedieron a una ponderación de la enorme muestra obtenida para hacerla representativa de los perfiles de edad, género y nivel educativo de los países participantes en la encuesta, con un pequeño margen de error de +/-2%.
Las políticas recibieron un amplio apoyo, siendo las más populares las de conservación de los bosques y la tierra (54% de respaldo público), más energía solar, eólica y renovable (53%), adopción de técnicas agrícolas respetuosas con el clima (52%), y mayores inversiones en negocios y empleos verdes (50%).
El profesor Stephen Fisher, del Departamento de Sociología de la Universidad de Oxford, dijo: “La encuesta —el sondeo de opinión sobre el cambio climático más importante jamás realizado— nos ha mostrado que las redes de juegos para dispositivos móviles pueden no solo llegar a mucha gente, sino que son capaces también de atraer la participación de diferentes tipos de personas en un grupo diverso de países. El Voto popular por el clima nos ha dejado una abundancia de información sobre la opinión pública que nunca hasta ahora habíamos visto. El reconocimiento de la emergencia climática está mucho más extendido de lo que se pensaba anteriormente. Los resultados muestran también claramente que la mayoría de la población quiere medidas de política robustas y amplias”.
Por su parte, Linda Maguire, Representante Residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, en Panamá expresó que: “Conocer los resultados arrojados de la encuesta nos permite reconocer el valor de contribuir a que todos los jóvenes del país y de otras naciones participen en la acción climática dándoles la oportunidad de interactuar con los gobernantes, porque a menudo no tienen un modo fácil de hacer llegar su mensaje a los responsables de gobierno de tomar decisiones. Realmente es una realidad que el cambio climático avanza implacablemente y que nuestro futuro depende de las acciones que tomemos hoy para abordarlo”.
En tanto Jessica Young, Gerente de Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Sostenible del PNUD, en Panamá, manifestó que alzar la voz para ser parte del debate global por acciones climáticas es lo que demandan los jóvenes en el mundo, asegurando que la juventud panameña también está construyendo su liderazgo en ello. “Es súper valioso contar con la participación activa y oportuna de la juventud, desde la adolescencia, en Panamá el grupo de Jóvenes contra el Cambio Climático liderado por mujeres jóvenes profesionales de menos de 25 años en su mayoría hicieron su incidencia política de forma que sus voces fueran recogidas en los resultados para un análisis específico de lo que abogan.
La gente joven reconoce claramente que tenemos la misión de reducir la temperatura del planeta en esta Misión 1.5 (grados centígrados) y que para ello debemos cambiar nuestros hábitos de producción y consumo, nuestros estilos de vida para atender la urgencia climática como una apuesta para mejorar la vida de todas las personas”, concluyó.
La encuesta revela una vinculación directa entre el nivel educativo de la persona y su deseo de que se adopten medidas climáticas. Se observa un reconocimiento muy elevado de la emergencia climática entre los encuestados con educación universitaria en todos los países, desde países menos adelantados como Bhután y la República Democrática del Congo (82% en ambos) a países ricos como Francia (87%) y Japón (82%).
En lo que respecta a la edad, se observó que las personas jóvenes (mhenores de 18 años) tienen una mayor probabilidad de creer que el cambio climático supone una emergencia climática que las personas por encima de esa edad. Sin embargo, otros grupos de edad no quedan lejos; así, el 65% de las personas entre 18 y 35 años, el 66% del grupo de 36 a 59, y el 58% de los mayores de 60 años perciben también la emergencia climática, lo que ilustra el amplio alcance de esta perspectiva.