Tras la adhesión del gobierno panameño a la Declaración de Chapultepec, el Sindicato de Periodistas de Panamá emitió un comunicado en el que exige respeto a los derechos laborales por encima de la protección oficial de los intereses mediáticos empresariales.
Bayano digital ofrece a sus lectores y seguidores en las redes sociales el texto del firme pronunciamiento sindical;
El desafío de garantizar la libertad de prensa y la protección laboral de los periodistas en Panamá
El Sindicato de Periodistas de Panamá (SPP) manifiesta su posición frente a la firma del gobierno nacional de adherirse a la Declaración de Chapultepec. Si bien el documento representa un esfuerzo por fortalecer la libertad de expresión y el trabajo periodístico, su implementación plantea inquietudes sobre los alcances reales de estas disposiciones, en un contexto donde las condiciones laborales de los periodistas siguen siendo precarias.
La Declaración de Chapultepec, adoptada el 11 de marzo de 1994 durante la Conferencia Hemisférica sobre Libertad de Expresión en México, se fundamenta en una concepción liberal que aboga por el libre funcionamiento de las empresas periodísticas y el ejercicio independiente de los comunicadores. Sin embargo, esta visión, más alineada con los principios empresariales de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), ignora aspectos críticos relacionados con los derechos laborales de los periodistas. El documento condena la asfixia económica a los medios, pero no aborda prácticas como los cercos mediáticos contra terceros, ni incluye disposiciones claras sobre la rectificación obligatoria de notas falsas o discriminatorias.
Aunque la Constitución Política del país garantiza la libertad de expresión e información, omite establecer derechos vinculados a la idoneidad profesional de los periodistas. Esta brecha legal se refleja en los bajos salarios, la inestabilidad laboral y la falta de mecanismos efectivos para garantizar la integridad y seguridad de quienes ejercen esta profesión.
En 2022, el SPP propuso ante la Comisión Nacional de Salario Mínimo un ajuste que establecería un salario mínimo de 1,500 dólares mensuales para periodistas y reporteros gráficos. Sin embargo, esta iniciativa fue archivada, profundizando la vulnerabilidad económica y social de los trabajadores del sector.
El SPP reitera que la libertad de prensa y expresión son pilares democráticos esenciales, pero resultan insuficientes si los periodistas no cuentan con una protección legal adecuada frente a las presiones del mercado y los riesgos inherentes a su labor. En la actualidad, la carrera de periodismo en Panamá está subvalorada, y quienes la ejercen carecen de garantías laborales, académicas y jurídicas.
Es imperativo que el gobierno nacional impulse acciones concretas para desarrollar un periodismo sólido, veraz y transparente que fomente el desarrollo humano y social del país. Esto requiere la elaboración de una agenda programática consensuada con la participación de gremios periodísticos, especialistas, el gobierno y el Órgano Legislativo. Es necesario crear un marco normativo moderno que garantice salarios justos, estabilidad laboral y derechos profesionales para los comunicadores.
La firma de la Declaración de Chapultepec no asegura plenamente la libertad de expresión para quienes ejercemos la profesión de periodista. Constituyó principal argumento para cercenar la legislación sobre el ejercicio del periodismo y dar pábulo a la nefasta expresión de que “la mejor ley de periodismo es la que no existe”.