Por Paloma Martínez ‖ RCI
El Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil (INPE) publicó el lunes la tasa de deforestación para la Amazonia Legal Brasileña y el valor estimado representa su mayor nivel en más de una década.
Segun lo revelado, la deforestación amazónica representó 9 762 km² para el período comprendido entre agosto de 2018 y julio de 2019, un aumento del 29,54% en relación con la tasa de deforestación calculada para 2018, que fue de 7.536 km².
Esta tasa es el resultado de los datos generados por el Proyecto de Monitoreo de la Deforestación en la Amazonía Legal por Satélite (PRODES). El mapeo utilizó imágenes de satélite Landsat o similares para registrar y cuantificar las áreas deforestadas de más de 6,25 hectáreas.
PRODES considera como deforestación la eliminación total de la cubierta forestal primaria mediante la tala a poca profundidad, independientemente del uso futuro de estas áreas.
Como lo presenta este mapa térmico, los estados de Pará, Mato Grosso, Amazonas y Rondônia presentan el 84,13% de toda la deforestación observada en las zonas prioritarias.
Más deforestación desde la llegada de Bolsonaro
El aumento de los niveles de deforestación se ha incrementado aún más desde enero de 2019 cuando tomó posesión como presidente el político de extrema derecha Jair Bolsonaro, quien ha dicho en diversas ocasiones estar comprometido con la promoción del desarrollo económico de la Amazonía, abriéndola más a la inversiones agrícolas y mineras con regulaciones ambientales menos estrictas.
El ministro de Medio Ambiente de Brasil, Ricardo Salles, aseguró el lunes que se tomaría una serie de medidas para contrarrestar este movimiento de deforestación y anunció la celebración de una reunión el miércoles con los gobernadores de los Estados de la Amazonía.
Ambientalistas y organizaciones no gubernamentales culpan directamente al gobierno, diciendo que Bolsonaro tiene una fuerte retórica a favor del desarrollo y sus políticas de debilitamiento de la aplicación de la normativa ambiental están detrás del aumento de las actividades ilegales.
“El gobierno de Bolsonaro es responsable de cada centímetro de bosque destruido. Este gobierno es hoy en día el peor enemigo de la Amazonía”.
Marcio Astrini, coordinador de políticas públicas del Greenpeace
En agosto de este año, la agencia de noticias Reuters informó que el gobierno de Bolsonaro había deliberadamente comprometido las acciones de la agencia medioambiental Ibama, impidiendo el despliegue de un equipo de comandos de élite que trabajaban específicamente para asegurarse del cumplimiento de la ley destruyendo la maquinaria usada para deforestar ilegalmente.
El Observatorio del Clima de Brasil, una red de organizaciones no gubernamentales organizaciones que incluyen a Greenpeace, dijo que el 2019 el aumento de la deforestación fue el más rápido en términos porcentuales desde los años 90 y la tercera más rápida de todos los tiempos.
¿Qué medidas propone el gobierno para evitar la deforestación?
En conferencia de prensa el lunes, el ministro brasileño de Medio Ambiente, Ricardo Salles dijo que anunciará una serie de medidas que incluirán el uso de imágenes satelitales de alta resolución para contrarrestar la deforestación.
Además, aseveró que profundizará la aplicación de la normativa ambiental.
Salles indicó que las causas de la deforestación son la tala ilegal, la minería y la ocupación ilegal de tierras y dijo que era necesario crear oportunidades económicas para la región.
El ministro dijo que todas las opciones están sobre la mesa para contrarrestar la deforestación, incluyendo el uso de las Fuerzas Armadas en las operaciones.
