Reformas constitucionales generan aceptación y rechazo en Panamá
‘Damos inicio a un proceso de revitalización de nuestra democracia que terminará con la participación democrática de nuestro pueblo’ dijo Carrizo, quien también exhortó a los diputados para que presenten una ‘propuesta virtuosa’ para que sea considerada en las urnas a través de una consulta popular.
El proyecto, consensuado por 22 sectores integrantes de la Ccnd, aclara la separación de los poderes del Estado y reconoce que el Ministerio Público como el competente para realizar investigaciones judiciales y propone crear el Tribunal Constitucional como máximo organismo para interpretar la ley suprema del país.
Igualmente incluye lo relacionado con derechos humanos y políticos, división administrativa del país, derechos y deberes individuales y sociales, cultura, régimen agrario y ambiental, entre otros.
El Ccnd, creado mediante la Ley 20 de 2008, es considerado ilegítimo por el Frente Nacional pro-Asamblea Constituyente (Fnpac), porque es un organismo carente del poder constituyente que solo el pueblo puede ejercer mediante el sufragio, además de que no fue elegido democráticamente y se constituyó para otros fines, señaló.
‘El pueblo desconoce por completo el contenido de las reformas propuestas por ese ente, además de que muchas de sus propuestas son claramente cuestionables, como la de nombrar magistrados vitalicios en la Corte Suprema de Justicia’, opinó el grupo a través de una declaración al que Prensa Latina tuvo acceso.
El Fnpac descalificó a la actual Asamblea Nacional para generar ‘una Constitución que tenga por norte, el manejo honesto de la gestión pública’, tomando en cuenta que su ‘composición y control sigue en manos de diputados y diputadas acusados de malversación de fondos del Estado, aunque se hayan renovado algunas caras’, dijo.
En su lugar, el movimiento integrado por organizaciones sociales, gremios profesionales, sindicatos y centrales obreras, personalidades e intelectuales, solicitaron al presidente Laurentino Cortizo convocar a la ‘única forma democrática de participación’.
Al mismo tiempo, hicieron un llamado ‘al pueblo panameño, para construir la unidad popular, social en medio de la diversidad para luchar juntos, que asegure la convocatoria lo más pronto posible’, a una Asamblea Constituyente y construir así un Estado verdaderamente democrático y de derecho, concluyó el documento.