Dos acontecimientos

Mientras que en nuestro país se espera hoy el arribo del líder de la iglesia católica, el papa Francisco, en medio de expectativas de esperanza y fraternidad, en Venezuela la agudización de una confrontación que ya marca 20 años parece abocarse a nuevos estadios de confrontación.

0
100

Dos acontecimientos

Mientras que en nuestro país se espera hoy el arribo del líder de la iglesia católica, el papa Francisco, en medio de expectativas de esperanza y fraternidad, en Venezuela la agudización de una confrontación que ya marca 20 años parece abocarse a nuevos estadios de confrontación.

Por Julio Bermúdez Valdés
Redacción de Bayano digital

Abanderado desde que asumió el papado por el ejemplo humanista de san Francisco de Asís, el jefe de una de las congregaciones religiosas más influyente de nuestro tiempo ha sido portador de una propuesta de defensa de los sectores más vulnerables de la sociedad, donde no tienen espacio ni la ambivalencia ni el oportunismo.

La desigualdad, la hipocresía y las injusticias, han sido blanco de sus críticas y ha señalado con rigurosidad la corrupción que afecta muchas sociedades.

“La corrupción es un mal mas grande que el pecado” ha dicho en reiteradas ocasiones. En su discurso de agosto de 2014 ante la Asociación Internacional de Derecho Penal, Francisco aseguró que “la escandalosa concentración de la riqueza global es posible a causa de la complicidad de los responsables de la cosa pública con los poderes fuertes”.

“La corrupción es en sí misma también un proceso de muerte: cuando la vida muere, hay corrupción”, dijo en esa ocasión el Santo Padre.

Pero el de Francisco ha sido un discurso puntual y preciso. No solo se ha referido a la degradación que representa el robo de recursos que produce la sociedad, sino que ha señalado a quienes la ejercen y la actitud que asumen:

“El corrupto -ha indicado- no puede aceptar la crítica, descalifica a quien la hace, busca disminuir cualquiera autoridad moral que pueda cuestionarlo”.

En ese mismo camino desde que remplazó a Benedicto XVI en el papado, ha sido severo con uno de los crímenes más atroces en los que han estado involucrados integrantes del clero: la pedofilia.

El pasado mes de diciembre ante la curia del Vaticano, Francisco fue categórico al señalar que: «A aquellos que abusan de menores les diré lo siguiente: cambien y entréguense a la Justicia humana y prepárense para la Justicia divina».

Quien llega ésta tarde a Panamá, en el contexto de la Jornada Mundial de la Juventud, ha sido y es uno de los más grandes aliados y portador de los mejores valores de la humanidad, suficiente como para decirle ¡!Bienvenido Papa Francisco!, tu mensaje alumbra hoy las mejores esperanzas del hombre.

El otro evento que copa la atención regional lo es la situación de Venezuela.

Hoy se esperan dos movilizaciones multitudinarias, una a favor y otra en contra del gobierno del presidente Nicolás Maduro, antecedidas por polarizados pronunciamientos de fuerzas locales y externas.

En el marco de una situación de confrontación que ya lleva más de 20 años, de un lado está la administración Maduro, respaldada hasta ahora por las Fuerzas Armadas y de otra una Asamblea Nacional que administra una cuota de poder insuficiente para defenestrar a su rival.

Cuenta, sin embargo, con el aval decisivo y abierto de Estados Unidos, consignado este martes en un mensaje público del vicepresidente norteamericano Mike Pence,  por el llamado Grupo de Lima y un entorno mediático, cuya articulación podrían estar coincidiendo con la agenda de los llamados conflictos de baja intensidad, destinados a doblegar voluntades políticas.

Mientras que Caracas apela a la legitimidad de las elecciones del año pasado y declara a la Asamblea fuera de ley, esta última, en abierto desafío, anunció ayer que asume la gestión de gobierno, en lo que trasciende más como una declaración política que como un hecho efectivo.

Pero la declaración de la Asamblea parece ser la cabeza de esperados levantamientos militares, el primero de los cuales fracasó este lunes, luego que 27 efectivos golpistas fueran arrestados por las fuerzas leales a Maduro.

Aunque la vicepresidenta de Venezuela Delcy Rodríguez pronunció ayer un enérgico discurso de rechazo a las palabras de Mike Pence, Caracas parece estar contra la pared, y este miércoles parece decisivo para su futuro.

Hasta ahora los herederos de Hugo Chávez se han mantenido al frente del país con una significativa cuota de poder, pero no sería extraño que este día marque cambios cualitativos en una batalla que podría elevar los estadios de confrontación, de los que no se pude descartar la posibilidad de una guerra civil, un escenario que podría aportar la justificación para una intervención extranjera ese país.

Dejar una respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí