Tragedia de los inmigrantes

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Una mujer coloca flores alrededor de cadáver de un grupo de inmigrantes que náufrago en una zona costera. (Foto: EFE).

Por Franklin Ledezma Candanedo
Periodista y Escritor

Desde la primera imagen del cadáver de un inmigrante en una playa de Cádiz hace 30 años, miles de muertos no han sido suficientes para corregir este gigantesco fracaso de los gobiernos de todo el planeta.

En realidad, ese no fue el primer caso de un ser humano que murió en su empeño de huir de la pobreza y la violencia en su país, pero fue el primer caso documentado gráficamente, por un novel fotógrafo español.

Los emigrantes, en su gran mayoría, en todas partes del mundo, están condenado al anonimato, a la indiferencia y al olvido institucionalizado. Son incontables los muertos en el mar, los desaparecidos en el desierto, numerosa las tragedias ocurridas en medio de la sal, la arena, ríos, pantanos y montañas e, incluso, en selvas de cemento.

Urge Contar al mundo que los muertos no son números ni estadísticas sino seres humanos en busca de una mejor calidad vida, en paz, con justicia y desarrollo sostenible. Su huella, su rastro está por todas partes, en las calles estrechísimas de Thiaroye sur Mer, a las afueras de Dakar, donde las madres siguen soñando con que un día verán a sus hijos volver realizados y con una sonrisa en sus labios; en la carretera entre Bamako y Gao, en Malí, por donde circulan los autobuses repletos de jóvenes con el sueño de “la aventura” en la mirada; en la estación de transportes de Niamey, en Níger, donde se reagrupan y descansan antes del último esfuerzo; en las oscuras casas de Agadez, donde aguardan.

Tres décadas después de la primera foto de un migrante muerto en la playa de Los Lances, en Tarifa, el Mediterráneo sigue tragándose la vida de cientos de personas cada año. La gente sigue muriendo, mientras que gobernantes insensibles de toda Europa continúan mirando hacia otro lado, en tanto que cada día crece en progresión geométrica el discurso de odio, xenofobia y racismo.

Tantos han dedicado años a que no se nos olvide que el capítulo español de la historia universal de la infamia lleva impreso, desde aquel 1 de noviembre de 1988, el sello de esos cadáveres mojados. De esos cuerpos y esos naufragios que son, en realidad, los pilares sobre los que se asienta el peor naufragio de todos, el de una clase política europea (y de todos los continentes, añadimos), sin el coraje necesario para afrontar esta tragedia y una sociedad que, pasado el sobresalto de la portada o el minuto y medio de televisión, sigue mirando hacia otro lado.

Por eso, y porque son hermanos nuestros que padecen hambre e injusticias en sus respectivos países, porque se les violentan sus derechos humanos diariamente, porque son presas fáciles de la narco-política existente, porque son víctima de la rampante corrupción de gobiernos títeres de la bestia (666) genocida.

Un canto-homenaje a los inmigrantes centroamericanos

Un canto para ti
hermano inmigrante
para revindicar tu estatura
y valores
porque eres para el fascista
imperial
un terrorista que busca
colapsar
la guarida de este engendro
de todo mal.

Te canto a ti
hermano inmigrante
centroamericano
porque te niegas a morir
sin esperanzas
y sin futuro
y al buscar otros lares
promisorios
el dromedario te construye
infame muro.

En caravana vas
hermano mío centroamericano
con tu carga de sueños rotos
y de miseria
olvidando que la bestia que pare
guerras a granel
te reserva espinas y fusiles
que construyen fúnebres panteones
en tu piel.

Un canto para ti
Hermano centroamericano
que no te vas de tu tierra
porque quieres
sino porque te expulsa
la violencia
y la pobreza
y porque el salvaje neoliberal
gobernante
te marcó para siempre
con el herrete de la miseria
y la tristeza.

Te canto a ti hermano
centroamericano
que vas en pos de igualdad
mientras que el fascista
cavernario
ofende a todos
por igual
a la comunidad LGTB
a hermanos originarios
igual que lo hace en la tierra
del Lincoln
legendario
donde ostenta oscuro
galardón
de Leonard Peltier
el preso más antiguo
de la humanidad.

Te canto a ti
Hermano centroamericano
y con mi canto le rindo homenaje
a tu arrojo
y valentía
porque no le temes a la muerte
si ya estás en vida muerto
en esa Patria tuya
que te ignora
maltrata
y ofende
mientras pocos mueren atragantados
de múltiples riquezas
usurpadas.

Es para ti mi canto-homenaje
hermano centroamericano
porque no eres ni criminal
ni violador
porque luchas con empeño
con ardor
para que tus hijos sean ciudadanos
productivos
y no reos como sus madres
y hermanas
en mazmorras del genocida
imperial.

Te canto a ti
Hermano centroamericano
para que te llenes de optimismo
con mis letras
y las uses como armas
para derrotar
al racista
y xenófobo
imperialista.

Combate hermano inmigrante
Centroamericano
con tu caravana de futuro
y dignidad
a ese fascista reeditado
y altanero
padre de los Bolsonaro
de la Patria Bolivariana
nuestros hermanos
que le niegan a los pueblos
derechos adquiridos
mientras siembran tempestades
de neo liberalismo
e injusticias
y le rinden tributo al becerro de oro:
El capital.
(18-11-2018)

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