La Vanguardia Torrijista rinde homenaje al ángel caído, Saint Georges Walcott.
Por Cecilio E. Simon E.
Redacción de Bayano digital
A las 9:45 del domingo 25 de agosto cayó St. George Walcott, un ángel guerrero que honró en vida su nombre, por la liberación de Nicaragua como lo haría San Miguel Arcángel.
St. Georges, militante de la organización estudiantil GAICUCHO – NIR se integró a la Brigada Victoriano Lorenzo, en el Frente Sur Benjamín Zeledón y adoptó el seudónimo del “Ciego”, porque perdió un ojo en combate.
“24 de diciembre de 1978 estaba en un pantano con agua a la cintura. La aviación somocista bombardeó el área, y una esquirla le dio en un ojo: de allí el seudónimo del CIEGO”.
Yo no se disparar esta vaina
Nos cuenta uno de sus camaradas, que se ofreció como voluntario para ir al operativo de Peñas Blanca. Al estar en pleno combate, el compañero 14 del Comando al ver que no dispara lo increpó, a lo que el Ciego respondió, «yo no sé cómo se disparar esta vaina». En pleno combate recibió su primera instrucción sobre el manejo del Garant.
El intrépido negro, de descomunal tamaño, se enlistó por sus propios medios en el Frente Sur sin el entrenamiento básico, que dio la Guardia Nacional de Panamá a los combatientes de la Brigada Victoriano Lorenzo.
Con risas y tristezas
Al triunfo de la revolución volvió al país, fue apresado y posteriormente viajó a los Estados Unidos donde vivió como joven revolucionario.
Contaba entre risas y tristeza sus experiencias y anécdotas como miembro de una organización se había dispersado. Sus dirigentes, dedicados a sus actividades profesionales, algunas en destacadas posiciones, no le ofrecieron el apoyo que esperaba, decía el “Ciego”.
Solidaridad
Vivió sus últimos años en la Barbería de Pio y recibía el apoyo económico de sus amigos de la comunidad afrodescendiente en Río Abajo, sus compañeros de la Brigada y del embajador de Nicaragua en Panamá Marvin Ortega.
