Por David Carrasco
Director de Bayano digital
La represa del río Bayano es la mejor opción para poder abastecer de agua al Canal de Panamá, especialmente en los períodos críticos de la estación seca, con el objetivo de garantizar el tránsito seguro y expedito en la vía interoceánica.
Así lo detalló el activista social, ambientalista y ex trabajador canalero Gilberto García, en una conferencia dirigida a dirigentes de la Central Nacional de Trabajadores de Panamá (CNTP), quienes convocaron a sus bases para debatir en forma urgente asuntos de interés estratégico.
García, integrante del colectivo Bayano, mostró mapas, videos, estudio y documentos que desaconsejan la validación de la propuesta técnica de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), que apuesta por el embalse de río indio, para aumentar la reserva hídrica disponible.
El proyecto oficial prevé la construcción de una presa de concreto compactado con rodillo, con niveles operativos que oscilarán entre los 40 y 80 metros sobre el nivel del mar, así como un túnel. La superficie proyectada sería de unas 4.600 hectáreas, equivalentes el 8 por ciento del área total de la cuenca del río Indio, segun los planes trazados.
La ACP sostiene que el proyecto del lago artificial de río Indio es una ”solución clave” para garantizar la estabilidad y seguridad hídrica de Panamá durante los próximos 50 años”. No obstante, ese argumento fue refutado por diversos consultores independientes y expertos en temas hidráulicos, entre ellos Ambrosio Ramos, quien ha recorrido todas la cuencas hidrográficas en la república.
Hablan los expertos en aguas
En declaraciones a medios de prensa, Ramos coincidió con el enfoque de García y aclaró que el Canal de Panamá utiliza 118 m3 por segundo todo el año, de los cuales 18 m3 son para el suministro de agua de las potabilizadoras urbanas y 100 m3 para el tránsito de barcos en el sistema de esclusas fe la vía acuática. Ello sugiere el surgimiento de alternativas para el uso racional del recurso hídrico.

Se estima que río indio represado proveería unos 23 m3 por segundo, mientras que desde el embalse de Bayano (ya construido) saldrían todo el año 160 m3 por segundo para responder a la demanda hídrica.
García manifestó que la propuesta de río Indio es ”oscura” y oculta su efecto traumático sobre más de 5.000 personas (campesinos y pequeños productores) en resistencia que serán desalojadas de la tierras que ocupan desde hace varias generaciones en la cuenca hidrográfica de gran actividad fluvial.
“El vicepresidente de la Oficina de Proyectos Hídricos del Canal de Panamá, John Langman, se vio muy incómodo, colocado contra la espada y la pared, al ser cuestionado en el foro técnico sobre el tema, que fue realizado este mes con el apoyo y la coordinación de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos (SPIA)”, reseñó García.
Seguidores de la encíclica papal rechazan los desalojos en río Indio
En el contexto de un intenso debate nacional, el obispo católico Manuel Ochogavía denunció la “militarización” y manipulación informativa en el caso de río Indio. Su pronunciamiento se produjo durante la Conferencia Episcopal Panameña (CEP), ante el aumento de las tensiones y diferencias entre las comunidades ribereñas pobres y la ACP.
Ochogavía planteó que las autoridades canaleras están actuando con “vacíos comunicativos” y “manipulación de la información”, incluido el uso de un sospechoso censo como medio para desvirtuar las respuestas irreductibles de los habitantes que no se han dejado seducir por agentes oficialistas. Ese procedimiento denunciado violaría el Acuerdo de Escazú, de 2018, sobre el acceso a la información clara, transparente y veraz.
García manifestó que un estudio sobre alternativas hídricas elaborado por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos no menciona en ninguna de sus páginas y anexos al río Indio, por lo que ”es extraño que el gobierno y la ACP promuevan con tanto ahínco esa iniciativa”, mientras que los sectores financieros se frotan las manos.
El conferencista aclaró a los líderes de la CNTP que hoy rige un ”silencio sepulcral” en la ACP sobre la inactividad de las 18 tinas de reutilización del agua dulce tropical instaladas en la vía acuática. Las tinas fueron incorporadas al tercer juego de esclusas, inaugurado en 2016, para ahorrar el 60 por ciento del preciado líquido en los ”esclusajes”, pero en la actualidad están fuera de servicio y no hay informes concernientes al modelo paralizado en el que fue invertido dinero del pueblo panameño.
García instó a los trabajadores organizados a desempeñar acciones heroicas y protagónicas en defensa del manejo transparente y en contra de los abusos de la Junta Directiva de la ACP. Adujo que es necesario impedir todo perjuicio al legado de los mártires de la gesta patriótica y soberana de enero de 1964, que allanó el camino para la firma de los Tratados “Torrijos-Carter” el 7 de septiembre de 1977.
