Aeropuerto de Tocumen convertido en base de EEUU
(Redacción de Bayano digital)
EL aeropuerto internacional de Tocumen, localizado a unos 30,6 kilómetros del centro de la capital panameña, ha sido convertido en una base estadounidense disfrazada, para el supuesto rastreo del tráfico de drogas, denunció Cecilio Simon, docente universitario e integrante del Consejo Editorial del semanario Bayano digital.
Simon hizo el señalamiento en presencia de representantes de organizaciones que participaron en las actividades conmemorativas del 27 aniversario de la invasión de Estados Unidos a Panamá, que provocó destrucción, luto y dolor al pueblo panameño. Añadió que el uso de las instalaciones aeroportuarias por Estados Unidos, ha sido realizado “con el auspicio de los gobernantes que han ocupado la Presidencia (de Panamá) después de la invasión”.
El orador detalló, previo al inicio de una “Marcha Negra” en homenaje a los caidos, que el 20 de Diciembre de 1989 debe ser recordado por los panameños como un Día de Duelo Nacional, porque “fuimos cruentamente masacrados por el imperialismo norteamericano sin una causa justa”, lo que se tradujo en un ataque sorpresivo y demoledor, con un elevado saldo de víctimas.
Recordó que la noche del 19 de diciembre de 1989, el profesor Saúl Landao lo llamó vía telefónica para informarle que la 82ava. División Aerotransportada de Estados Unidos invadiría a Panamá. Entonces, Simon era decano de la Facultad de Administración Pública de la Universidad de Panamá y con la información recibida de esa fuente fidedigna se dedicó a alertar a todos los patriotas, ante la posibilidad de que fuese concretada la invasión militar.
Simon aprovechó el tiempo asignado en el programa del acto solemne para resaltar el papel orientador de Bayano en la población, en defensa de la soberanía nacional. Subrayó que “desde las páginas del Bayano, nosotros empezamos a develar la historia…a decir con su nombre, qué fue lo que pasó durante esos días”, para que la gente no reduzca ese episodio a un Duelo Nacional o al “ruego a un gobierno incapaz” para que lo apruebe oficialmente.
Afirmó que la Comisión de la Verdad instalada por el presidente Juan Carlos Varela, para institucionalizar la fecha, carece de verdadera representación popular y que en algunos casos incluye a elementos que aplaudieron la invasión. Adujo que ello no debe ser permitido, como tampoco hay que tolerar el intervencionismo del embajador de Estados Unidos en Panamá, John Feeley, al que describió como una especie de “procónsul” imperial.
Simon instó al movimiento popular a mantener una “actitud vigilante” en contra del clientelismo, venga de donde venga, porque es un vicio que contamina las conciencias de las comunidades y distorsiona los procesos democráticos en los que deben ser elegidos los verdaderos dirigentes de bases en este país.
