Un rumbo nacional malogrado

0
93
La invasión de Estados Unidos a Panamá en 1989 sirvió para reinstalar en el poder a la oligarquía. Foto de Archivo.

Por Filiberto Morales / Docente universitario

Después del magnicidio del Comandante Omar Torrijos, el rumbo de la nación panameña lo definieron los grupos pro oligáquicos y pro imperialistas en proceso de restauración. Esto se consolidó a partir del golpe de Estado que implicó la Invasión militar, política y cultural norteamericana de la Natividad y el Año Nuevo de 1989.

Los torrijistas creímos de buena fe que, luego de una década de gobierno de la lumpenburguesía financiera e intermediaria y sus aliados transnacionales, el gobierno del Partido Revolucionario Democrático (PRD) daría una direccionalidad estratégica hacia un desarrollo incluyente.

Bastó menos de un año para evidenciar lo iluso de aquella creencia. Y es que como nos enseñó el Maestro, no se le pueden pedir peras al olmo. Los intereses de quienes asaltaron el Estado y las fuerzas sociales y económicas a las que les sirven, definen el carácter antipopular y antinacional del “rumbo” que le han impuesto a Panamá. Hoy, el mensaje del señor presidente de la República no pudo ser más claro y definitorio.

La vida nos enseña, mil y una veces más, que únicamente las organizaciones populares y los movimientos sociales pueden definir para la nación panameña un rumbo nacional-popular, democrático, progresista, capaz de acometer las tareas inmediatas y estratégicas en función del bienestar de las actuales y nuevas generaciones.

Guardadas las particularidades nacionales, lo que ocurre en países hermanos de la región marca algunas rutas dignas de estudiar.

Dejar una respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí