La Red Eclesial Ecológica Mesoamericana-capítulo Panamá y el Equipo de Pastoral Indígena Arquidiocesano rechazaron a través de un comunicado el planteamiento oficial de reabrir la mina explotada por Minera Panamá, S.A. en el distrito de Donoso, para poder cerrarla en forma adecuada y definitiva.
Bayano digital reproduce el comunicado emitido, en el contexto de un intenso debate sobre la minería a cielo abierto y las fuertes presiones ejercidas por consorcios y multinacionales dedicadas a la extracción de minerales:
Lo que hay que respetar
La Red Eclesial Ecológica Mesoamericana-capítulo Panamá y el Equipo de Pastoral Indígena Arquidiocesano, expresan su posición ante la nueva realidad surgida de las elecciones:
En primer lugar, aunque el proceso electoral, en la mayor parte del país, transcurrió en relativa paz -por lo que nos felicitamos a todos- sin embargo, hay varias cuestiones que necesitamos comentar:
1] Nos da esperanza que la nueva Asamblea tenga un buen número de diputados nuevos, llenos de promesas de honestidad, trabajo, servicio. Ojalá no se quede todo en promesas y no se dejen envenenar por los que todavía quedan.
2] Pareciera que las elecciones las ganó el desempleo, el hambre, la falta de dinero, el juega-vivo, la corrupción, las promesas sin sentido,… y no un programa de gobierno o una figura carismática.
3] El nuevo gobierno tiene que ganarse su legitimidad para avanzar ya que sólo obtuvo el apoyo de poco más de un cuarto de la población con derecho a voto (27%).
4] Hay varios asuntos que el nuevo gobierno tiene que respetar:
4.1. No desarrollar minería extractiva en ningún lugar del país. Nada de “abrir para cerrar”, porque eso “abre” un periodo de confusión.
4.2. Recuperar el sentido solidario de la CSS, buscando con honestidad y seriedad las soluciones compatibles con nuestra realidad. Sanear la entidad, con transparencia.
4.3. No permitir que los dineros del pueblo se sigan perdiendo (p.e. hay que recuperar los casi 8 mil millones de dólares anuales —dato oficial de 2021— que no se pagan en impuestos, cada año).
4.4. El Canal y todos sus componentes son para beneficio de todos los panameños y hay que dar cuentas de ello.
4.5. La salud de calidad es un derecho inalienable de todos los panameños, no es negociable.
4.6. La Asamblea es para legislar, no para dar prebendas ni recibir beneficios particulares.
4.7. Los cargos y puestos políticos son para servir, no para aprovecharse.
4.8. Es urgente —de manera crítica— que defendamos esta Casa Común que llamamos Panamá y trabajemos por mejorarla (ver carta pastoral de los obispos panameños, Querida Panamá).
4.9. La educación universal y de calidad es la condición ineludible para salir del atraso político, cultural, económico y social en que estamos. Hay que invertir en ella.
4.10. Panamá es un país multicultural y plurilingüe, eso hay que respetarlo, valorarlo y defenderlo. La Educación Intercultural Bilingüe es fundamental en el sistema educativo.
4.11. Migrar es un derecho humano, ningún migrante es ilegal. Tenemos que servirlos, acompañarlos y defenderlos; no hay que cerrar fronteras.
Invitamos a todos los cristianos y personas de buena voluntad a que estemos vigilando para que estos asuntos fundamentales de nuestra convivencia como país, sean respetados y llevados adelante. ¡Que el Dios de la Vida nos dé la Fuerza para continuar trabajando por Panamá!