Gobierno de Nicaragua decreta tres días de duelo por muerte de Ernesto Cardenal

0
82
Ernesto Cardenal

Declaración de duelo del Estado y Gobierno de Nicaragua

El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, a nombre del Pueblo Nicaragüense, y del Estado de esta Nicaragua Soberana, con todo respeto y consideración, al conocer el fallecimiento del Ilustre Poeta Nicaragüense, Ernesto Cardenal, traslada a toda su familia, y a sus amigos, las más sinceras condolencias.

Al conocer el Fallecimiento del Poeta Cardenal, reconocemos su aporte a la Lucha del Pueblo Nicaragüense.

Reconocemos igualmente todos sus méritos culturales, artísticos, literarios y su extraordinaria poesía en la que siempre supo alabar a Dios, en el Cielo, en la Tierra, y en todo lugar.

Ernesto Cardenal de tantos otros reconocimientos de Gobiernos y Organismos Culturales Internacionales, constituye una Gloria y un Orgullo Nicaragüenses, que admiramos profundamente dando gracias a Dios por su vida, sus méritos y su infatigable Amor a Nicaragua.

El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional está emitiendo un decreto de tres días de Duelo Nacional y se suma a las Ceremonias de Gratitud y Despedida de este Hermano Nicaragüense, Bendecido con Dones y Merecimientos que han puesto en alto el nombre de Nicaragua, y su propio nombre, desde sus aportes a la Cultura Universal y a la Liberación Nacional.

Arturo Wallace

La poesía ya había hecho de Ernesto Cardenal una figura de renombre internacional cuando una fotografía cimentó el estatus icónico del sacerdote nicaragüense, que falleció en Managua este domingo a los 95 años.

La famosa foto de Juan Pablo II regañando a Ernesto Cardenal. (Foto La Prensa Nicaragua)

En la imagen se lo ve con su inconfundible barba y cotona blancas, arrodillado ante el papa Juan Pablo II y esbozando una leve sonrisa, su eterna boina negra reposando humildemente en una de sus rodillas.

El papa, con gesto adusto y un dedo acusador, lo amonesta públicamente frente a sus colegas del gobierno de Nicaragua, congregados ese 4 de marzo de 1983 en el aeropuerto de Managua para recibir al pontífice.

«Usted debe regularizar su situación», fue el regaño público de Juan Pablo II durante su primera visita a tierras centroamericanas.

«Como no contesté nada, volvió a repetir la brusca admonición. Mientras, enfocaban todas las cámaras del mundo», contaría luego el poeta y sacerdote en su autobiografía.

 

Dejar una respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí