Washington, feb (PL) – El presidente estadounidense, Donald Trump, justificó las acciones represivas contra centenares de indocumentados en todo el país y dijo que los operativos están en correspondencia con sus promesas de campaña.
Según el mandatario, el objetivo es detener a delincuentes, miembros de bandas, traficantes de droga y otros que enfrentarán la deportación a sus naciones de origen.
El 25 de enero pasado Trump firmó dos órdenes ejecutivas que exigían la construcción de un muro en la frontera con México, establecía el aumento de agentes para acelerar la búsqueda de extranjeros sin papeles, en particular quienes tengan antecedentes penales e incluso los que cometieron contravenciones menores.
Desde el viernes, funcionarios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) detuvieron a centenares de inmigrantes en todo el país, en particular en Arizona, California, Georgia, Nueva York, Florida y Texas, en lo que califican de un operativo de rutina.
La redada motivó protestas de importantes organizaciones defensoras de los indocumentados, las cuales orientan a los posibles afectados en las comunidades para que puedan enfrentar esta acción represiva.
El jefe de la Casa Blanca prometió que emitiría nuevas órdenes ejecutivas, posiblemente mañana, para reemplazar las que bloquearon la semana pasada tres jueces de la Corte de Apelaciones del Noveno Distrito.
Dichos magistrados decidieron mantener el veto temporal al decreto firmado el 27 de enero por el jefe de la Casa Blanca, que suspendía durante 120 días el programa de reasentamiento de refugiados, prohibía indefinidamente la llegada de los sirios e interrumpía por tres meses la emisión de visas a ciudadanos de Irán, Iraq, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen.
De acuerdo con la cadena televisiva CNN, esta semana legisladores republicanos que participaban en encuentros con sus electores en sus territorios fueron testigos de manifestaciones de rechazo a la nueva Administración y al liderazgo del partido rojo.
Desde la toma de posesión de Trump, el 20 de enero pasado, crecieron de manera significativa las protestas contra el tratamiento a los inmigrantes, los esfuerzos por privatizar la educación, así como la negativa a las medidas contra el cambio climático.
El diario The New York Times, al reflejar hoy estos movimientos anti-Trump, calificó de caóticas las primeras semanas del mandatario en la Casa Blanca.