Tras la invasión de Estados Unidos a Panamá, iniciada el 20 de diciembre de 1989, empezó a desdibujarse el patrimonio canalero, recuperado como resultado de las largas luchas y el sacrificio de los mártires de varias generaciones de panameños.
La planificación inicial de las áreas canaleras fue sustituida por un burdo y despreciable modelo de bienes y raíces, que permitió el enriquecimiento de algunos y el despojo del legado colectivo y las esperanzas de desarrollo humano y social.
Sin duda alguna, la lucha de los jóvenes para poner fin a los enclaves mineros en suelo panameño, permite volver a colocar en primer plano la recuperación de las áreas revertidas usurpadas por una élite codiciosa vinculada al capital financiero y a la explotación de las riquezas nacionales.
Café Bayano dedica este espacio a todos aquellos que nos dieron patria y a la tarea impostergable de la recuperación soberana del territorio vendido al mejor postor, así como a la planificación y uso ordenado de los bienes transferidos en la franja canalera.