Avanza proyecto para construir la paz en San Miguelito
El proyecto busca reactivar esfuerzos y conceptos vertidos por diferentes actores del quehacer nacional e internacional.
Por Luis Carlos Samudio Guerrero
Abogado, docente y mediador
Preocupado por la ola de criminalidad en el distrito de San Miguelito y en el país, he desarrollado un proyecto de plan piloto, cuyo objetivo es que sirva a la construcción de este rompecabezas, alentando los esfuerzos cooperativos de nuestros antepasados y presentes, que han aportado en sus respectivas épocas y lo cual se debe considerar valioso para seguir el camino de cambiar el semáforo de rojo a verde, toda vez que el anhelo es crear un ambiente de paz social que permita una mejor calidad de vida.
Este es un trabajo producto de mis actividades como docente e investigador en las universidades UIP, UAM, ISAE, UNESPA, donde he impartido cursos de Mediación Escolar, Penitenciaria, Comunitario y Seguridad.
El proyecto prevé reactivar esfuerzos y conceptos vertidos por diferentes actores del quehacer nacional e internacional, que apuntan a la vigencia del Pacto de Estado por la Justicia. Por otro lado, hay que destacar los conceptos vertidos sobre el Decreto Ejecutivo N° 260 de 7 de junio 2006, que señalan que “los representantes de los órganos Ejecutivo y Legislativo tienen la necesidad de poner en marcha la Política Criminológica del Estado panameño, atendiendo las recomendaciones del Pacto de Estado por la Justicia”.
Organismos como Alianza Ciudadana Pro Justicia, Participación Ciudadana y la sociedad civil, profesionales versados en la materia, están preocupados por el aumento de la criminalidad en Panamá. Por ello, nos unimos al clamor de los actores citados, para que se implemente lo antes posible una política criminológica.
Esos aspectos deben ser retomados en esta política criminológica, toda vez que la sociedad reclama su aplicación y desarrollo de manera práctica y ejecutiva. El proyecto es una alternativa para mejorar la situación de la criminalidad en Panamá, específicamente en el distrito de San Miguelito. Se ha hecho un llamado al gobierno, a los grupos religiosos, al comercio, las ONG y a la comunidad, para que tengan una activa participación.
Lo que se pretende con ello, es motivar a las empresas privadas del distrito de San Miguelito, para que se sumen a esta iniciativa, concebida como un plan piloto desarrollado en otros países. Su rol no es sólo económico, sino también social, para generar espacios de diálogo social, estabilidad social, económica y favorecer la paz.
Por ejemplo, en Colombia, la Alcaldía Mayor de Bogotá ha desarrollado incentivos para empresas que construyen paz en ese país: “Premio emprender paz. Inicia la quinta versión del Premio Emprender Paz: la apuesta empresarial, dirigida a organizaciones que desde su actividad empresarial contribuyan a la paz en Colombia”. Todos sabemos que ese país tiene un porcentaje altísimo de criminalidad, al igual que Venezuela y Brasil, entre otros.
Con esos ejemplos, se busca motivar a los actores sociales emprendedores, con el propósito de que, como parte de la política criminológica, el gobierno panameño reproduzca lo que se está desarrollando en el país vecino, dando incentivos a las empresas que apuesten a este proyecto.
Es conveniente capacitar al Grupo Social Comunitario en temas como Criminología, Desarrollo humano, comunitario y habilidades sociales y democráticas. Finalmente, en Métodos Alternos de Resolución de Conflictos, para lograr una mejor convivencia, tolerancia y paz social, del control social formal e informal, y lograr minimizar la problemática delincuencial, trasladando a la comunidad los instrumentos que contribuyan a instaurar la convivencia pacífica en la sociedad, mejorando la calidad de vida.
En ese sentido, solicitamos la formación y capacitación de los participantes, con sus respectivas dietas como incentivos. El propósito del grupo social comunitario es que Construyamos la CULTURA DE PAZ y el DESARROLLO humano y comunitario desde las Comunidades, incentivando públicamente el trabajo del grupo o la comunidad, motivando al trabajo, el desarrollo comunitario, dirigiendo y orientando sobre las tareas comunitarias.
Deseamos que este proyecto se convierta en una realidad en el distrito de San Miguelito, con la finalidad de darles oportunidades a estudiantes y profesionales del área de Criminología, Turismo, Trabajo Social, Psicología, Sociología, Mediación, Negociación y Resolución de Conflictos. Es importante que el recurso humano sea residente en el área, creando una infraestructura que permita el funcionamiento operacional y funcional, para captar y evaluar de manera viviente los diferentes fenómenos sociales que se dan en cada uno de los corregimientos del distrito, como son la deserción escolar, la desintegración familiar, las adolescentes embarazadas, la prostitución clandestina de menores, entre otros.
Juntos trabajemos a favor de la paz y la convivencia pacífica.