Nanorobots para buscar y destruir tumores: primeros test exitosos en animales

0
132
Tecnología de los nanorobots.

Por Leonardo Gimeno | amlat@rcinet.ca

La lucha contra el cáncer es quizás uno de los objetivos más perseguidos por grupos de científicos de todo el mundo. En los últimos años, los tratamientos han ido mejorando aunque todavía, las personas sometidas a quimioterapia y rayos tienen que luchar con numerosos efectos secundarios muy dañinos.

La revista especializada Nature Biotechnology publicó esta semana un artículo científico en el que se informa que un grupo de investigadores fue capaz de demostrar que diminutos robots autónomos tienen el potencial de funcionar como vehículos inteligentes para curar cáncer en ratones. Los nanorobots de ADN buscan los tumores cancerosos e inyectan medicamentos que cortan el suministro sanguíneo y de esta manera, provocan en primera instancia, una trombosis intravascular que resulta en una necrosis tumoral y segundo, la inhibición del crecimiento del tumor.

Esta investigación fue realizada por un grupo de científicos de la Universidad Estatal de Arizona (Estados Unidos), en conjunto con el Centro Nacional de Nanociencia y Tecnología de la Academia china de Ciencias. Hao Yan, director del Centro de Diseño Molecular de la Universidad de Arizona, expresó que este equipo había logrado el desarrollo del “primer sistema robótico de ADN totalmente autónomo” en terapias contra muchos tipo de cáncer.

  • La utilización de nanorobots de ADN para la administración de medicamentos funciona provocando que el ADN programado se pliegue en sí mismo como origami y cuando llega al lugar adecuado se despliega como una pequeña máquina dispuesta a inocular el remedio.

Según especialistas, los métodos actuales para combatir los tumores malignos son inadecuados en la mayor parte de los casos, pues si bien pueden ser exitosos, los efectos secundarios son destructivos pues los medicamentos no pueden discernir entre células cancerosas y normales y atacan a todas por igual. Hace ya mucho tiempo que se busca la manera de enfocar específicamente las células tumorales para evitar maltratar las células sanas y este nuevo estudio demuestra que la utilización de estos nanorobots hechos de ADN podría ser muy efectiva en este tipo de tratamientos.

El equipo de investigación separó el ADN de un virus y lo convirtió en una especie de “hoja de ADN” donde se cargó una enzima llamada “trombina” (químico encargado de coagular la sangre). A este tubo le fue adjuntado pequeños trozos de ADN que se unen a una molécula específica encontrada en las células tumorales.  Cuando estos nanorobots son introducidos en un organismo viajan hasta encontrar las moléculas tumorales asociadas, luego se unen y se despliegan para soltar la “trombina” que actuará sobre el cáncer coagulando el suministro de sangre al tumor, cortando sus nutrientes y finalmente matándolo.

Los test preliminares fueron realizados en ratones de laboratorio infectados con células humanas de cáncer de mama, de ovario, melanoma y cáncer de pulmón. En cada uno de los casos, en un lapso de 48 horas, los nanorobots se aferraron a las células  vasculares en los sitios del tumor causando así coágulos cortando su suministro de sangre lo que lo llevó  a la muerte de la masa cancerosa. De esta manera, extendieron la vida de los animales y retrasaron o invirtieron el desarrollo del tumor en sí. En el caso puntual del melanoma, los nanobots parecieron prevenir la diseminación hacia el hígado y en el caso del cáncer de pulmón, luego de haber sido atacado el tumor, el órgano mostró la capacidad de repararse a sí mismo cuando el tumor fue  lentificado.

Uno de los resultados más interesantes aparte del hecho de haber logrado la necrosis en el tumor fue que sólo las células cancerosas que fueron apuntadas y programadas en esta “hoja de ADN” fue que los bots no causaron coagulación en otras partes del cuerpo. Tampoco se registró ninguna evidencia que los nanorobots llegaran al cerebro donde podrían haber causado efectos secundarios como por ejemplo una apoplejía.

Los autores de este proyecto están muy contentos con los progresos y entusiasmados con las posibilidades aunque son muy precavidos puesto que todavía queda muchísimo camino por recorrer antes que estos nanobots lleguen al torrente sanguíneo de un ser humano.  

Fuentes: Nature Biotechnology, ifscience, techcrunch.

Dejar una respuesta

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí